El Mal absoluto como coartada
Hasta el 11-S el Mal absoluto era, en exclusiva, el Holocausto. Cualquier genocidio propio era menor, pues siempre cabía recordar el Holocausto, no sólo como un mal inmenso, sino como el auténtico y único Mal absoluto. Para explicar cualquier genocidio de los enemigos, se citaba el Holocausto como comparación y así entenderíamos que cualquier respuesta […]