Afrontar el proceso de refundación de la izquierda en Chamberí tenía una importante dificultad y otra circunstancia que lo facilitaba. La dificultad evidente es la composición social y política de este distrito: uno de los dos distritos de Madrid que expulsa con más crueldad a las rentas medias y bajas dado el precio de la vivienda, Chamberí se está despoblando y de quien se queda una amplísima mayoría es de derechas por su nivel de renta: en las últimas elecciones municipales el PP sacó en Chamberí un 69% de voto, el PSOE un 20% e IU un 6%. Sin embargo, Chamberí ha vivido en los últimos años las mayores movilizaciones vecinales de su historia: hace unos años Esperanza Aguirre e Ignacio González modificaron ilegalmente un proyecto para construir un parque en nuestro distrito y nos colocaron un campo de golf para beneficio de sus familiares y amigos. Eso generó un desconocido movimiento vecinal en el que la gente de IU, entre otra mucha, participó activamente y que ha generado lazos y tejido vecinal antes inexistentes en el distrito.
Así las cosas, cuando desde las direcciones federal y regional de Izquierda Unida se mandató a sus asambleas locales la constitución de foros que vertebraran la refundación de la izquierda, en Chamberí nos lanzamos inmediatamente al ruedo. Los foros no son sólo un lugar de encuentro de los movimientos sociales, sino el espacio local desde el que afrontamos la refundación: su objetivo es la movilización social, hacer política, sí, pero expresamente como sujeto constituyente de la izquierda que estamos refundando. Así que los foros por la refundación eran algo inexistente que sólo se está poniendo en marcha en las últimas semanas: que todos y todas participáramos en y con los movimientos sociales forma parte de las exigencias propias del activismo de izquierdas; que esa participación se organice formalmente con un objetivo de constitución de organización política con el impulso de IU es algo inédito.
La primera convocatoria del Foro de Chamberí por la Refundación de la Izquierda fue un éxito cuantitativo sorprendente. Muchísima gente que no militaba en IU acudió a la convocatoria y allí les explicamos el proceso diseñado y nos dimos un pequeño grupo motor que encauzara las siguientes convocatorias. Desde entonces ha habido varias reuniones del Foro que, si bien ha decrecido en cantidad de gente (como era previsible), sí ha avanzado hacia la difícil movilización del distrito y hacia la participación en la refundación de la izquierda.
El eje de tal movilización pretendemos que sea la oposición a la privatización del Canal de Isabel II (la mayoría de cuyas instalaciones están en Chamberí), que nos permite afrontar muchos ejes políticos. Desde la oposición al neoliberalismo en lo local que nos quiere privatizar hasta el agua a la lucha contra esta globalización: en Enlazando Alternativas el Canal de Isabel II fue juzgado por el Tribunal de los Pueblos por su desastrosa actividad en América Latina. Desde la defensa de un urbanismo ecológico y volcado hacia los vecinos (las parcelas verdes del Canal están cerradas al vecindario y si se abren son para encasquetarnos un campo de golf) a la lucha contra la corrupción instalada en la dirección del Canal. De momento vamos a organizar un acto el 29 de junio (del que ya informaré) contra la privatización del Canal desde esas ópticas variadas esperando que sirva de embrión para la movilización de vecinos y trabajadores del distrito.
Por otro lado el miércoles que viene discutiremos en el Foro los “Ejes para un nuevo programa político” que se discutirán en la I Asamblea de Refundación del próximo 26 de junio. Como todos los foros que se han constituido en Madrid, el de Chamberí tendrá un delegado en la Asamblea. Será Óscar, una de las personas que no milita en Izquierda Unida y que más activamente está participando en el proceso de refundación en nuestro barrio.
Queda mucho trabajo por hacer. El proceso de refundación de la izquierda es tan ambicioso como imprescindible y la debilidad del conjunto de la izquierda y de la izquierda en Chamberí (cuando más necesaria es su fuerza) es difícil de negar. Pero habiendo tanto por hacer habría sido imperdonable que no lo intentáramos desde que fuera posible. En ello estamos (acabamos de empezar) y en ello continuaremos.
Espero que contar lo que estamos haciendo en Chamberí ayude a otros distritos y pueblos a enriquecer sus procesos locales.
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