Sacaron a Su Majestad a defender la necesidad de un pacto sobre economía. Después  quienes nos llevaron a la crisis, nos dijero que esto sólo lo arreglamos entre todos (bonito homenaje a aquella web que sacaron cuando España estaba de fiesta inmobiliaria: hayquerepartirlosbeneficiosdeestoentretodos.org, ¿quién no se acuerda de tan generoso gesto?). Y después se convocó a todos los partidos: en estos momentos hay que ponerse de acuerdo y sacar la economía adelante entre todos porque, coma arriba, coma abajo, todos estamos en el mismo carro, en las mismas posiciones.

Ayer la montaña parió el ratón más deseado. Tan pobre es la propuesta de pacto que no es la primera noticia para ninguno de los grandes periódicos digitales esta mañana y en muchos casos ni siquiera es la primera noticia económica. Tan pobre es la propuesta que no esperaron a que Zapatero estuviera en España para que lo presentara él (con lo que le gusta a él protagonizar las grandes soluciones y cargar a sus ministros los problemas).

Son medio centenar de medidas que no aspiran a modificar sustancialmente el modelo económico español. Nuestro gobierno ya ha asumido que de esta crisis se sale con más neoliberalismo, con menos gasto social -que el dinero público está para rescatar bancos-, sin tocar los impuestos a las grandes fortunas y tratando de impulsar de nuevo a los sectores económicos que nos llevaron a la crisis, especialmente el constructor.

Los parches no tienen por qué ser malos: de hecho uno (y sólo uno de entre las cien propuestas que presentó IU) de los parches fue propuesto por IU y ahora se señala como la medida estrella. Se trata de impedir por ley que el embargo por impago de hipoteca deje a nadie por debajo de una renta de subsistencia. Algo positivo, claro, pero que por sí solo no conseguirá más que impedir o limitar tragedias concretas. Tampoco habría mucho que oponer a la medida que plantea que lo comprado en el Duty Free de los aeropuertos no compute como peso de las maletas (salvo quizás el hecho de que se potencie un comercio que no paga impuestos: en realidad no entiendo muy bien en qué cambia esto con respecto a lo que hay, así que si hay que aplaudir entusiasta la medida lo hago). Genial, supongo que a alguien le facilitará su viaje: enhorabuena a los premiados. La ministra Salgado ha avisado: estas propuestas son las que hay, no se admiten propuestas adicionales ni más completas.

Cualquier observador comprende que para el Gobierno y para quienes tanto se esforzaron en fomentar un grandilocuente pacto de Estado la crisis es (como el fútbol) un estado de ánimo. Si nos hacemos todos juntos una foto, con muchas corbatas, con cara de gravedad, pero todos juntos, todos de acuerdo, apartando nuestras pequeñas diferencias… la cosa se arreglará. Se trata de volver a emprender aquel tipo de crecimiento del que tanto presumimos en debates electorales y que nos ha llevado a esta crisis:se basaba en una ficción, sí, pero en una ficción en la que creían todos, que es lo importante. Si salimos de ésta, de aquí a otra crisis igual pasarán varias elecciones y podremos presumir de crecimiento y de falta de memoria.

Venga, va, vamos tirando. Entre todos punto org. Podemos. A por el pacto. Oé.

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