En un pueblo de Madrid hubo una moción de censura hace unos días que ha generado un ruido de esos que sólo Madrid es capaz de exportar: en Velilla de San Antonio los dos concejales que fueron elegidos en las listas de Izquierda Unida (y a cuya expulsión dará trámite IU-CM esta tarde) se aliaron con el PP para echar de la alcaldía a un PSOE local del que denunciaron casos de corrupción (y que está siendo incomprensiblemente apoyado por Tomás Gómez).
Es uno de los casos en el que las costuras de aquel «programa, programa, programa» se resquebrajan. El programa, programa, programa debería ser el mínimo sine qua non: tiene que ser imposible que IU alcance acuerdos de gobierno sin acuerdo programático. Pero debería haber más requisitos que limiten las posibilidades de formar parte de gobiernos municipales, autonómicos o estatales.
La corrupción, en efecto, es uno de ellos: la evidencia de que hay partidos locales (y regionales y estatales) cuya práctica política es la corrupción debería hacernos desvincular de esos partidos y perseguir política y judicialmente los casos de los que tengamos constancia. Con corruptos, no hay acuerdo programático que valga.
Otro criterio fundamental es el meramente democrático. Y sin ser muy exquisito: me refiero a democracia meramente formal. Izquierda Unida no puede tener acuerdos con partidos que no sean demócratas. Supongo que hay muchas posibles discusiones al respecto, pero hay evidencias de que el Partido Popular no es un partido demócrata. Ha apoyado (y a veces promovido) cuantos golpes de estado se han cometido contra gobiernos que llevan a cabo un programa parecido al que llevaría a cabo Izquierda Unida. Hace apenas unas semanas, en nombre del Partido Popular, el infame Carlos Iturgaiz acudió como observador de las elecciones de los golpistas hondureños y se felicitó por tal ejercicio democrático. Si ganara las elecciones en España un programa como el de IU, el Partido Popular o sus equivalentes conspiraría para derrocar tal gobierno sin límites: no sería la primera vez. Una de las utilidades principales del PP es impedir por todos los medios que haya gobiernos que lleven a cabo políticas realmente de izquierdas, lo que evidencia que si se alcanzara un acuerdo programático con tal partido sería un papel tan inocuo para ellos como sus códigos éticos presentados por la señora que no veía Jaguars en su garaje.
Es evidente (¿o no?) que no es necesario formar parte de gobiernos siempre que se pueda y a toda costa. Existe incluso la posibilidad (demasiado poco explotada) de votar una investidura y pasar inmediatamente a la oposición (por ejemplo, para impedir que gobierne un partido que no es mínimamente demócrata). Por ello en materia de alianzas deberíamos ponernos todos los instrumentos preservativos que se pueda. No se trata de que se cumplan dos de los tres requisitos, sino de que se cumplan los tres: con corruptos y con partidos antidemocráticos no se negocia; y con partidos democráticamente homologables en los que la corrupción no esté instalada hasta los tuétanos se puede negociar un acuerdo de gobierno en base al programa, programa, programa y respaldado por las bases.
A veces denunciamos una deriva «confederal» cuando queremos decir «taifas«: quien se salte estos requisitos y llegue a acuerdos al margen de la política general de alianzas de IU se está situando fuera de IU (la expulsión sólo lo constataría). Y coherentemente, también se situarian fuera de IU, si los hubiere (cosa que habría que probar), los cómplices y colaboradores necesarios.
[…] This post was mentioned on Twitter by IX Asamblea de IU, Hugo Martínez Abarca. Hugo Martínez Abarca said: En el blog: Alianzas más allá del programa (IUlogía ma non troppo) http://bit.ly/73qALX […]
Pero tampoco se le puede permitir al P$O€ todo.
En mi pueblo hubo un pacto igual para echar a los corruptos del P$O€ del poder. anteriormente, algunos de elos decían que harían lo que quisieran porque IU no tendría cojones de juntarse con el PP.
Y lo hicimos, y conseguimos que el PP aplicara políticas de izquierdas que el P$O€ nunca quiso aplicar.
No todo es el nombre, en el P$O€ también hay corrupción apoyan o no la democracia según les venga…
jfk, claro que no hay por qué consentirle todo al PSOE. Ni a nadie: allí donde sean unos corruptos o lo que sea (o no sea posible un acuerdo mínimamente de izquierdas) se les combate desde la oposición o desde un acuerdo de gobierno con otra fuerza que cumpla esos requisitos. Con el PP, en ningún caso: si los electores sólo han dejado la posibilidad de que gobiernen unos u otros, cuando no haya posibilidad de decantar la balanza (que es en casos extremos) nos mantenemos absolutamente al margen y cuando se pueda decantar la balanza pero sin claridad, votamos al PSOE y nos vamos a la oposición, que no pasa nada.
Información Bitacoras.com…
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El PSOE tampoco es un partido demócrata según los criterios que expones: apoya cuantos golpes de estado, invasiones y bombardeos se le ponen al paso (creo que ni uno más ni uno menos que el PP). Ahí tenemos estos días a Moratinos (y a su inefable escudero, el llamazarista A. Santos) considerando a la oligarquía golpista hondureña «un nuevo actor político al que hay que tener en cuenta» (y tanto que hay que tenerlos en cuenta!!).
¿O es que ya no recordamos el apoyo al golpe contra Chávez del PSOE por boca de Trini Jiménez (miembro de la Trilateral), responsable de exteriores del partido de la OTAN en aquellos años?
El problema, como siempre, lo tenemos en IU con quienes actúan al dictado del PSOE.
Un saludo.
Yo discrepo Hugo. No conozco bien el caso de Velilla, pero la política local suele ser muy particular y en ocasiones puede ser necesario y preferible pactar con el PP, o con el PNV, o con los batasunos, para asegurar unos mínimos. Porque la alternativa puede ser corrupción y desgobierno.
Esto tampoco quiere decir dejar manos libres por completo a los grupos municipales, ni pasar cosas que se deben más a filias y fobias personales, a alianzas de clientelas o grupos, que a cuestiones programáticas. O sea, analizar las cosas concretas, pero no me parece rechazable a priori un pacto con el PP.
Desconozco de manera objetiva lo ocurrido en Velilla de San Antonio. Sólo sé lo que se cuenta en los medios informativos y las opiniones que sobre el hecho se han desparramado en los blogs afines a IU y los comentarios que sobre ellos se han producido. El por qué y el cómo de la moción, que son las cuestiones fundamentales, se me escapan, por lo que no me atrevo a opinar sobre el “comportamiento” de estos dos concejales (por ahora) de IU.
No es el primero ni el único (seguro que no será el último) caso donde concejales de IU presentan una moción de censura junto al PP u otros partidos para arrebatar la alcaldía a algún alcalde del PSOE. En Andalucía se conocen varios casos, entre ellos el de Bollullos Par del Condado, de donde soy, vivo y he militado en IU desde su fundación (que ahora se pretende refundar).
No sé si en otras Comunidades se da el mismo caso, pero en Andalucía las direcciones regionales firmaron el llamado “Pacto de progreso” por el cual tanto PSOE como IU se comprometían a llegar a acuerdos con la lista más votada o en último extremo dejar gobernar a la lista más votada. Desde el principio tanto unos como otros, en numerosos pueblos, se saltaron los acuerdos y a lo largo del tiempo se han producido mociones de censura en ambos sentidos. La sinrazón de dichos pactos ha tensionado a numerosas asambleas locales hasta extremos de obviarlos y hacer lo creían más conveniente. Es difícil, imposible, que en los numerosos pueblos de Andalucía se diesen las condiciones idóneas para que dichos pactos tuviesen su razón de ser. Las cientos de circunstancias que se dan en el devenir político diario no podrían traer otra consecuencia que esa. Además, todos sabemos que los “Pactos de progreso” no se hicieron sólo para aislar al PP de las alcaldías sino para conseguir, tras cambio de cromos, las canonjías prometidas a los políticos profesionales de la organización, que también los hay.
He tenido que dividir el texto en dos partes. A continuación publico el resto.
¿Por qué no me permite publicarlo?
Me dice que está duplicado.
¿Qué puedo hacer para publicar el resto del comentario?