Me la han dado con queso. Qué cabrones. Me lo he creído. Y es que hay que reconocer que esos malditos jueces, policías, fiscales, periodistas,… lo han organizado perfectamente para que pareciera que el brazo político de la Gürtel tenía algo que ver con la Gürtel. La foto de familia es contundente: toda la ejecutiva del Partido Popular salió a defender la verdad: los implicados en la trama Gürtel son víctimas de una persecución, de una conspiración urdida por toda esa gentuza que mejor estaría deteniendo etarras que a los honrados financiadores del Partido Popular. A mí, insisto, me la han dado con queso. Me ponen 17.000 folios delante y me creo lo que sea.

El PP defiende siempre que puede la familia tradicional. En eso es coherente. Hasta hace apenas un par de siglos no existía el matrimonio por amor. Las familias tradicionales se unían por cuestiones de negocios que a veces se apañaban con mucha antelación. Cuanto más sucias fueran las familias, más sucios eran los negocios que servían de alianzas. Ese modelo de familia pervive hoy en la aristocracia y en las familias reales. Y en El Escorial. Y en Génova.

Los crédulos que seguimos sin ver la conspiración detrás de tanto folio, tanto coche de lujo regalado, tanta cuenta en Suiza, tanto Agag y caja B (que ya fuimos crédulos al creernos el cambio climático, al creernos que el 11-M no lo había urdido Rafael Vera y que Saddam Hussein no estaba detrás del 11-S) vemos en la familia popular a la familia tradicional: es la tapadera del negocio, tan sucio como lo sea la familia. Los crédulos a los que nos la han dado con queso podemos llegar a pensar que la foto esa de arriba hace inviable que lo que fue un matrimonio de negocios se convierta ahora en una familia honrada con la dimisión de éste o aquél. Que sólo vale el cierre del negocio.

Sólo queda la conspiración. Sin la conspiración, ¿qué dirigente del PP, alto o pequeño, no sería un ladrón o un cómplice de ladrones? ¿Quién denunció la patraña del chiringuito marbellí según la cual no había robo, sino escuchas ilegales? ¿Quién renunció a dinero de la Gürthel  para su campaña electoral? ¿Es el PP de Murcia el único que no se metió en el negocio, porque ya tenía bastante con lo suyo? ¿Fue De la Rúa a la boda de Aznar y Agag?

Ya digo que es la impresión por los 17.000 folios de mentiras, las grabaciones ilegales y manipuladas, el silencio de Rajoy, el chiringuito de Cospedal. Cuando olvidemos tanta mentira podremos volver a poner la música y bailar: ¡Vivan los novios!

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