Ayer comentábamos la sorprendente aparición de un diputado autonómico del PSOE llamado Juan Antonio Ruiz Castillo en la concentración en apoyo al genocidio sufrido por el pueblo palestino: una manifestación de cuya legalización me alegro por mucho que sus objetivos sean repugnantes, pero que inhabilitan a sus participantes para la defensa de los derechos humanos, como es obvio.

Estamos esperando que el PSM anuncie la expulsión de quien avala 1300 asesinatos y comparece con la extrema derecha a apoyar a los representantes y defensores de tal genocidio (dado que por un quítame allá esas cajas el mismo partido ha abierto expediente a otros dos importantes socialistas). Antes de su expulsión algún compañero, si no él mismo, se ha dedicado a buscar en google quién había escrito algo sobre el diputado. Y ha encontrado lo que escribí ayer. Y ha dejado el siguiente comentario:

Hugo, preocupate de los expedientes que teneis en Izquierda Hundida. Los militantes del PSOE no opinamos sobre vuestras discrepancias internas, o deberiamos?. Coincido plenamente con el diputado Juan Antonio Ruiz, o ¿es que crees que hay que apoyar a los terroristas de Hamas para ser de izquierdas?

Lo primero que pensé es que sería uno de esos trolls sionistas que se disfrazan con distintas identidades, que se hacía pasar por socialista, así que comprobé si el tipo había dejado ya comentarios tan imbéciles como este. Y no. Porque no es un lector de blogs, sino un profesional de la política que estaba esta mañana en la sede del PSOE buscando páginas que se atrevieran a expresar rechazo por quien se va una mañana de domingo a apoyar a los genocidas.

Aquí tenéis la captura del comentario y los detalles sobre la IP desde la que se ha enviado el comentario, que pertenece al PSOE.

Tengo clarísimo que la gran mayoría de la militancia del PSOE repudia los crímenes que está cometiendo un Estado, el de Israel, contra un pueblo, el palestino. Por eso confío en que esas bases quieran evitar que sujetos como éstos empañen su legitimidad democrática. O como los que no han anunciado que nunca más venderán armas a los genocidas.