En Irak se ejecutó hace seis horas la condena a muerte que un supuesto tribunal dictaminó por genocidio contra el tirano depuesto Saddam Hussein. Si esa es la doctrina de los tribunales iraquíes (ahorcar a quienes causan un genocidio en Irak) hay gente que no debería pasarse por Bagdad.

En su caso, también estaríamos en contra de que se les condene a muerte.